Una escuela de EE UU prohíbe a sus alumnos que se abracen
Los más de 900 alumnos de una escuela de educación de enseñanza media del municipio estadounidense de Cliffwood, en el estado de Nueva Jersey (EE UU), no pueden abrazarse desde que el director del centro prohibiera esa muestra de cariño tras haber detectado “contactos físicos inadecuados” entre los menores.
La Matawan-Aberdeen Middle School es escuela “libre de abrazos”, como la ha descrito su director, Tyler Blackmore, al anunciar una controvertida prohibición que ha levantado la polémica entre los padres de los alumnos, de entre 11 y 14 años, pero que ha recibido el respaldo de los responsables de Educación del estado.
Los padres de los alumnos consideran que la prohibición sobredimensiona el problema de conducta”Tenemos la responsabilidad de enseñar a los niños a interactuar apropiadamente y procurar que tengan un ambiente estructurado y centrado en la educación académica”, ha asegurado el superintendente del distrito escolar de Matawan-Aberdeen, David Healy, en un comunicado en el que ha respaldado la decisión del director del centro.
Healy ha reconocido que no existe una normativa concreta relacionada con los abrazos en el sistema escolar de Nueva Jersey, pero ha asegurado que la decisión de prohibirlos entre los alumnos, bajo riesgo de amonestación, se ha tomado para dar respuesta a “algunos incidentes de contactos físicos inadecuados entre los alumnos”.
El responsable de las escuelas de esa zona ha subrayado que Blackmore debe tomar las decisiones adecuadas para garantizar “la seguridad y el bienestar” de los menores de los que es “responsable” debido a su cargo, aunque se ha comprometido a que ninguno de los alumnos sea expulsado si incumple la nueva norma implantada en el centro.
“Blackmore y su equipo actuaron de manera responsable”, ha aseverado Healy, quien salió así en defensa de un director al que numerosas personas de haber exagerado al prohibir los abrazos sin consultar antes con las asociaciones de padres, sobredimensionando así cualquiera que fuera el problema de conducta que se detectó entre los menores.